Wednesday, July 12, 2006

Superman Regresa (y extrañamente más joven que cuando se fue)


Hola, amigos, vuelvo a mi viejo blog para compartir con ustedes mi crítica de Superman Returns, la cual tuve el agrado de ver ayer en su Avant Premiere en nuestro país.



El año pasado recuerdo haber publicado en este blog una crítica de Batman Begins donde incluía un breve repaso sobre los clichés del sub-género de super héroes en el cine y cómo el film de Chris Nolan que reinicia la franquicia del encapotado rompía con todos y cada uno de ellos. Para los interesados, pueden encontrar ese texto haciendo click aquí.

Bryan Singer toma un camino notablemente opuesto en esta nueva adaptación de Superman a la pantalla grande, que de "nueva" se podría decir que sólo tiene la tecnología y los actores. Todos los clichés que comenté como desafiados por Batman Begins en está película son explotados y puestos abiertamente en nuestras narices recordándonos que el protagonista es EL héroe por antonomasia; el que inicia todo y quizás lo que puede sonar cliché en otros, en este caso es inherente al personaje tanto como caracterización como simbólicamente. Esto puede ser un gran acierto si de Superman se trata, siempre y cuando se encuentre una forma novedosa y atractiva de narrarlo. Y es ahí donde se produce una fuerte línea divisoria entre dos sensaciones muy fuertes que invaden al espectador durante la película.

Por un lado tenemos esa emoción que nos genera el énfasis que pone Singer en homenajear a las películas de Richard Donner protagonizadas por el recientemente fallecido Christopher Reeves; retomando de alguna manera la trama de las mismas, dándole un carácter similar a las personalidades tanto del héroe como de su alter ego (un poco forzado en la interpretación de Brandon Routh, quien por momentos sorprende por sus notables similitudes físicas y gestuales con su predecesor), adornando las escenas más grandilocuentes con la misma música y reproduciendo casi con exactitud los títulos de apertura (es imposible no sentir algo especial en el fanático cuando la película empieza con un golpe de nostalgia tan fuerte)

Por otro lado, tenemos el impacto negativo de la película, que pasa por algo muy simple: se trata de una secuela de una serie de películas de hace 25 años. Es complicado generar una sensación de novedad y de adaptación al nuevo milenio, así como es imposible forjar definitivamente un vínculo emocional entre esta nueva entrega y las películas de Donner ya que estamos hablando de diferencias tecnológicas abismales, sin mencionar el completo cambio de casting, que aunque lo intenta no logra reproducir la misma química entre los personajes.

En resumen, la película se queda a mitad de camino entre una secuela y la revitalización de una franquicia; y sólo nos queda la sensación de haber logrado un homenaje. Excelente homenaje por cierto, pero no mucho más que eso.

Siguiendo con la comparación con Batman Begins, mientras en ésta los únicos posibles desaciertos que podríamos plantear son las dificultad que se le presentaba al espectador de adaptarse visualmente a un nuevo lugar más realista y menos comiquero en relación con el personaje; en Superman Returns, Singer nos trae de vuelta a un lugar conocido donde nos sentimos cómodos; por supuesto, carece justamente de gran parte de los aciertos del film de Nolan, y eso hace que la película aunque es de similar duración a la antes mencionada, nos haga oscilar entre la emoción y el entretenimiento y algunos momentos faltos de ritmo y relevancia en la trama.

Quizás lo que más juega en contra de la película es el personaje mismo; y la necesidad de mantener su pureza tan lograda en las películas de Donner. Mientras hubiera sido muy acertado tomar sólo la pureza y riqueza conceptual, Singer opta por tomar el personaje y su interpretación de la época literalmente trayéndolo a este tiempo, generando ciertas incomodidades respecto a cómo nos relacionamos con el personaje. A pesar de la nostalgia que podamos tener por Reeves; estamos en un nuevo siglo, un nuevo milenio y un nuevo mundo, donde Superman bien podría tener un impacto muy distinto en la sociedad, siendo ésta una de las vetas que parecería más interesante en el argumento y sin embargo el director opta por dejar a un costado esa idea sin problema alguno. Superman regresó y sus ideales se mantienen intactos. Eso es lo único que debería importarnos.

Es evidente una búsqueda durante toda la película de resaltar cierta comparación con Jesús, Superman es un "salvador" enviado a la tierra por su padre para iluminar nuestro camino (de hecho Lex Luthor comenta el mito de Prometheo, aunque lo usa en oposición al hombre de acero) y el tema de la herencia del padre al hijo y demás no hace más que continuar esta línea durante toda la película. El uso de tomas descartadas por Donner para Superman I con Marlon Brando como el padre biológico del héroe enaltece un rol que si no fuera por este detalle nostálgico y simbólico nos recordaría al molesto Tío Ben de Spiderman, tooodo el tiempo con su "gran poder; gran responsabilidad" que terminaba cansando a la mitad de la película.

Técnicamente el film es impecable. Singer hace gala de formidables recursos cinematográficos que no sólo pasan por los efectos, sino la elección de planos y ángulos de cámara. Por supuesto los efectos también están, y esta vez realmente vas a creer que un hombre puede volar!!!

El casting es probablemente uno de los peores desaciertos de la película. No importa cuánto logremos abstraernos y disfrutar de la historia (la cual, por cierto, no es muy original pero entra en los parámetros de lo que podemos esperar de Superman) las edades simplemente no cuadran y eso es algo imposible de dejar de notar y un elemento de fuerte distracción durante toda la película. Si Superman se fue 5 años al espacio y cuando vuelve encuentra a Lois Lane con un hijo bastante crecido, qué sentido tiene hacer un casting de estos dos personajes con actores tan jóvenes? (sobre todo en comparación con los protagonistas del resto de la saga) Sacando eso de lado, las interpretaciones son acertadas; obviamente uno tarda en digerir a Brandon Routh como Superman, pero volviendo al concepto de la película como homenaje, logra adaptarse al rol imitando una gran cantidad de recursos incorporados por Reeves en su interpretación. Kevin Spacey actúa tan bien como siempre, aunque el Luthor que compone en esta película, como todo en el resto de la misma, termina quedando demasiado pegado a la interpretación del personaje en la saga de Donner.

En resumen, una cinta para nostálgicos, donde todo lo que significa Superman se ve reproducido de manera muy fiel, sólo que demasiado parecido a lo que ya vimos en la interpretación anterior, hace más de 25 años. En todo caso, le da un cierre bastante acertado a esa vieja saga y aunque deja el camino abierto por supuesto a tener sus propias secuelas, deja pendiente la duda de si hacen falta más allá del rédito económico que significarían para Warner Brothers. Parafraseando a Lois Lane en su ficticio artículo ganador del Pulitzer "¿Por qué el mundo no necesita a Superman?", se me ocurren varias razones basadas en el resultado final de la película lograda por Synger para darle la razón. Pero claro, ¿quién me quita la sensación de haber creido durante dos horas y media nuevamente que un hombre puede volar...?

PUNTAJE: 3/5 (buena)